"Aunque soy castellano de nacimiento, me he criado, ilusionado, enamorado y sufrido en Andalucía. Creo que me beneficio de esta dualidad"

- La memoria aparece en ambos casos como vaso comunicante o elemento unificador y, no obstante, en Los espacios vacíos irrumpe con fuerza el olvido, ¿por qué?  

- Cuando uno es joven, y no olvidemos que Las horas descontadas comienza en esa edad que no se olvida, (incluso los ancianos la tienen siempre presente como memoria inmediata), los recuerdos son su elemento catalizador. Por el contrario, en Los espacios vacíos no existe el tiempo, sólo el espacio, y a veces sin contenido. Creo que el olvido actúa aquí como un bálsamo purificador de un tiempo, unitario, que no nos gusta para nada. Esa es la razón.

- Cernuda, Tundidor…, la tradición andaluza y la castellana ¿cómo se manifiestan en tu discurso?

- Influyéndome, sin duda alguna, tanto una como otra, porque, aunque soy castellano de nacimiento, como lo es Tundidor, me he criado, ilusionado, enamorado y sufrido en Andalucía gran parte de mi vida, al igual que lo hizo Luis Cernuda. Creo que me beneficio de esta dualidad.

- Frente a la atmósfera, vagamente romántica de Las horas descontadas, ¿qué paisajes enmarcan la voz del poeta en Los espacios vacíos?

- Los duros paisajes del asfalto, la lluvia y el desamor. No queda mucho sitio para el romanticismo.